Falleció una amiga

Q.E.P.D. María Jesús Poblete Kaid

No éramos los más cercanos hoy, pero la conocí lo suficiente como para admirarla por ser una mujer inteligente, directa, alegre, deportista y creativa.

Suena a la mujer perfecta, pero no. Tenía su genio mi amiga.

Fuera de sus defectos y virtudes, era una mujer feliz. Una persona que merecía pasar mucho más tiempo en este planeta.

Q.E.P.D María Jesús Poblete Kaid

La vida no es corta, pero es verdad que pasa muy rápido.

Ahora, imagínate lo corta que habría sido tu vida si murieras hoy.

Hemos hablado muchas veces de lo difícil que es detenerse, observar, diagnosticar y volver a avanzar con más consciencia. Sin embargo, cuando me topo con la muerte, siempre pienso en lo frágil que es la vida y me cuestiono si estoy haciendo lo correcto con mi tiempo y con mi plata.

¿Vale la pena ahorrar? ¿Está bien hacer APV para ese Francisco que quizás nunca lo llegue a ocupar? ¿Estás usando tu tiempo en algo que, si murieras hoy, te haría sentir orgulloso?

No tengo respuestas claras, pero sí convicciones.

  1. Tengo que ahorrar porque no quiero ser un cacho financiero para mis hijos. Si no fuese por eso, probablemente me lo gastaría todo.

    Por lo mismo, quiero ahorrar lo menos posible para poder gastar el máximo en experiencias que me generen recuerdos.

  2. La vida no es corta, pero los años pasan rápido. Aprovecha el tiempo. No seas pelotudo.

A pocas semanas de que termine el año, creo que todos deberíamos reservar un espacio en el calendario con nosotros mismos para, al menos, hacer dos cosas:

  1. Calcular cuánto vamos a necesitar para jubilarnos en calma.


    Con ese número en la cabeza, comprometernos a partir el 2026 con un ahorro mensual que nos ponga en el camino correcto para no vivir preocupados.

    Y ojo, la idea principal acá no es obsesionarse con ahorrar. Todo lo contrario.

    El verdadero objetivo es saber cuánto podemos gastar. Lo que más me quita el sueño no es acumular plata, sino que maximizar mi gasto para encontrar formas de vivir que me generen felicidad y lindos recuerdos.

  2. Buscar ocupar mejor nuestro tiempo el próximo año.


    Y no solo para buscar “nuestra mejor versión”, sino para asegurarnos de pasar tiempo con esas personas que nos gustaría que estuvieran en nuestro funeral.

Cada día que pasa es un poco más tarde, independiente de si viviremos hasta los 100 años o solo por un par más.

La Make llegó hasta acá, pero estoy seguro de que aprovechó cada segundo. Viajó, se rió fuerte y, en su último adiós, estuvo acompañada por muchísima gente que le siguió entregando amor. Eso habla de la tremenda riqueza social que logró acumular.

Amiga mía, te vamos a extrañar y lo único que se me ocurre hacer para homenajear las ganas que tuviste de vivir es intentar el próximo año ser un poco más como tú.