18 meses

¿Estás loco? ¿Vas a dejar 15 millones de dólares arriba de la mesa?

Esta pregunta no me la hicieron a mí (ojalá). Se la hicieron a Matthew McConaughey. McConaughey tiene un Óscar, el premio más apetecido por un actor.

Pero estuvo muy, muy cerca de nunca obtenerlo.

Matthew tiene dos cualidades muy apetecidas en la industria: actúa bien y se ve bien. Eso lo llevó a sus primeros hits, sus primeros roles. Encontró un nicho, las comedias románticas (Romcoms, en inglés).

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Las películas eran hit tras hit. Pero había un problema, eran muy superficiales. O por lo menos, eso pensaba McConaghey.

En su vida real estaba viviendo mucho drama. Tener su primer hijo hizo que se cuestionara todo. Quería papeles más serios.

Pero Hollywood prefería las romcoms, y sus éxitos de ventas.

Preguntó por un par de roles de drama y nadie prestó atención. Ahí tomó una decisión extrema. Película de drama o nada. Nunca más actuaría.

Pasaron seis meses, nada. Llegaron ofertas de romcoms, pero nada de drama.

18 meses desde la decisión, un año y medio. Nada.

Empezó a cuestionarse su carrera. ¿Quizás podría ser entrenador del equipo de fútbol de su hijo? ¿Volver a estudiar leyes?

Llegó otra oferta para una romcom. Pero esta era especial. Le ofrecieron 8 millones de dólares.

La leyó, no gracias.

Le ofrecieron 10 millones.

No gracias.

12 millones. LES DIJE, no-gracias.

14,5 millones. Dijo aaah, la leeré de nuevo. Era el mismo guión, pero definitivamente había mejorado. Era más chistoso. Él era efectivamente el mejor actor para el rol.

Pero dijo no.

Aquí es donde entran las preguntas del principio. Venían de su familia, de sus amigos. Sus hermanos le hicieron una intervención.

Pero ese rechazo marcó un antes y un después. En Hollywood entendieron que iba en serio con lo de “no más romcoms”.

Dos meses después sonó el teléfono, y le ofrecieron su primer drama, Lincoln Lawyer. Esto fue en 2011.

Entre 2013 y 2014 apareció en:

• Dallars Buyers Club (donde ganó el Oscar)

• El Lobo de Wall Street

• True Detective (la mejor temporada de una serie de la historia)

• Interstellar

Esos cuatro roles son icónicos. Y estuvieron a punto de no pasar.

¿Qué sabía McConaghey que no sabía Hollywood? Quizás simplemente era terco, pero confió en sus instintos y aguantó mucho más que un ser humano normal.

Quizás el hecho de tener su vida financiera resuelta ayudó, pero me imagino lo difícil que debe haber sido rechazar esa oferta después de 18 meses esperando trabajo.

A veces la decisión correcta es aguantar.

A veces, hay que pivotear.

Vera Wang nació para patinar. Desde los 8 años entrenó en Nueva York durante el año y se iba Denver en los veranos para no parar. Era su pasión, su obsesión. Pero cuando no quedó en el equipo olímpico, se retiró.

Le gustaban los vestidos del patinaje, así que persiguió una carrera en moda. Entró a la revista Vogue, donde en 15 años llegó a ser una de las editoras senior más influyentes.

En el camino conoció a Arthur, que le propuso matrimonio. Wang tenía 40 años, y el mayor problema de todo el proceso del matrimonio fue…su vestido de novia.

Buscaba y buscaba y ninguno satisfacía sus necesidades. Como editora de moda te podrás imaginar que la vara era alta.

Se aburrió y decidió diseñar su propio vestido. Un año después, estaba abriendo su propia boutiqe de vestidos de novia.

Ofrecía vestidos de diseñadores reconocidos (Dior, Carolina Herrera, Guy Laroce), y uno que otro diseño de ella. Lentamente sus diseños se transformaron en los más populares.

Hoy, Vera Wang es conocida como la “reina de los vestidos de novia”. Ha vendido cientos de millones de dólares en la industria, y se ha ganado varios premios también.

¿Qué nos podemos llevar de estas historias?

Wang y McConaughey eran exitosos en lo que hacían. Pero en algún momento algo no los dejó dormir tranquilos.

Una inquietud que partió como una molestia (no me gustan las romcoms, no encuentro vestido de novia), terminó siendo la estrella de norte de sus carreras.

Cuando se dieron cuenta, tuvieron la valentía de tomar acción (rechazar películas, renunciar a su trabajo) y lanzarse de lleno a lo desconocido.

Hoy, ambos siguen trabajando en ese sueño. McConaghey protagonizando dramones, y Wang en desfiles. Viéndose increíble a sus 75 años.

Nunca es tarde para perseguir esa curiosidad. Ahora la pregunta es, ¿puedes aguantar 18 meses a que se haga realidad?

O quizás un paso anterior, ¿qué perseguirías?

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